Al igual que cuidamos nuestro cuerpo y cultivamos la mente, es altamente necesario mantener el deseo sexual en la pareja o incluso con uno mismo. Puede que la rutina y el estrés te limiten a la hora de trabajarlo. Pero siempre hay trucos para evitar que la sexualidad pase a un segundo plano en nuestra vida.
Si crees que están en un punto de inflexión y no sabes cómo recuperar al apetito sexual, ha llegado el momento de ponerse manos a la obra. Trabaja tu cuerpo, tu mente y tu autoestima para recuperar la líbido y volver a sentirte como antes.
¿Cuáles son los principales motivos por los que el apetito sexual suele perderse? ¿Qué hacer en estos casos para luchar contra la inapetencia en el terreno de la sexualidad? Si tengo poco apetito sexual, ¿qué puedo hacer en mi día a día? Te contamos todo lo que debes saber.
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🥰 ¿Qué es el deseo sexual?
El deseo sexual, también conocido como apetito sexual o líbido, es el impulso que se siente cuando tanto el cuerpo como la mente se emocionan con el sexo. Son las ganas de hacer algún tipo de actividad sexual, ya sea con uno mismo, tener pensamientos o fantasías, o mantener relaciones con una pareja.
Este deseo es inherente al ser humano. Es decir, nacemos con él con el fin de poder reproducirnos. El sexo es necesario para mantener una buena salud física y mental, para relacionarse con las personas, y por supuesto también con fines reproductivos.
Cuando sentimos apetito sexual, la frecuencia cardiaca aumenta, así como la presión arterial, y algunas partes del cuerpo se enrojecen como respuesta a la excitación.
Gracias al acto sexual se liberan neurotransmisores como la oxitocina, la dopamina y las endorfinas, que producen placer, bienestar y relajación física y mental, altamente beneficiosos para todo el organismo.
✅ ¿Por qué se pierde el apetito sexual?
La falta de apetito sexual se puede asociar con el cansancio, el estrés, la ausencia de bienestar o una baja autoestima. Los motivos por los que una persona o una pareja pierde el deseo sexual son variados, y en cada caso se deberá tratar de una forma diferente.
Este es un problema frecuente en parejas que llevan mucho tiempo juntas y que han caído en la rutina. Es más habitual en las mujeres que en los hombres, y se calcula que alrededor de la mitad de las chicas sienten la pérdida de deseo sexual en algún momento de sus vidas o de su relación.
No obstante, en los hombres puede pasar. La sexualidad de ellos se ve afectada por múltiples causas que, corregidas a tiempo, no tienen por qué interferir de manera negativa a la relación de pareja o a la forma de vivir su propia sexualidad.
Antes de adentrarnos en los consejos sobre cómo recuperar tu deseo sexual, cabe destacar cuáles son las posibles causas de la pérdida de la líbido. Vamos a ver las más frecuentes:
Problemas de pareja
Las discusiones constantes y la falta de entendimiento entre los dos miembros de la pareja puede pasar factura con el tiempo y acabar por disminuir la líbido de uno de ellos o de ambos. Es necesario aprender a comunicarse para que las relaciones sexuales fluyan de manera natural y más saludable.
Falta de tiempo
La falta de tiempo, el estrés o los problemas de ansiedad son algunas de las causas más frecuentes de la disminución del deseo sexual en la actualidad. Vivimos rodeados de tantas obligaciones y actividades diarias, que es imposible encontrar un momento de desconexión para dedicar exclusivamente a la pareja.
Problemas hormonales
Más frecuente en las mujeres que en los hombres, la acción de determinadas hormonas influyen en el apetito sexual. En etapas como la menopausia, la lactancia o la menstruación, así como el tratamiento con antidepresivos, antihistamínicos o la píldora anticonceptiva, modifica la biología natural del cerebro que ya no encuentra placer en el sexo.
Falta de autoestima
Una baja autoestima, los complejos corporales, o incluso haber sufrido algún tipo de abuso sexual con anterioridad también afectan a la líbido de una persona. Esto genera una gran ansiedad que necesita ser tratada poco a poco para acabar con la falta de ganas.
Ausencia de orgasmo
No todo en el sexo se centra en llegar al orgasmo. Pero si las prácticas se centran únicamente en esta meta, puede provocar frustración en personas que no siempre lo consiguen. Llevar a cabo otros tipos de estímulos íntimos con la pareja tiene los mismos resultados positivos y estrecha más los lazos de la relación.
👌 Cómo recuperar el deseo sexual con tu pareja
¿Y qué se puede hacer para recuperar el apetito sexual en hombres y mujeres que lo han perdido? Hay tantas salidas como causas que podrían afectar a la líbido de cada persona.
Los expertos en salud sexual y sexología recomiendan seguir una buena alimentación, practicar ejercicio físico diario, mimarse a uno mismo, descansar y liberar el estrés, para que el cuerpo esté al 100% en los momentos en que tenga que entrar a la acción.
El sexo no solo consiste en tener encuentros íntimos con la pareja. Es necesario conocer tu propio cuerpo, saber qué es lo que te excita, potenciar tus propias fantasías, y después compartirlo.
Si notas que ya no tienes ganas de tocarte, que tu deseo es más bajo, que no te apetece estar con tu pareja como antes, o que tu apetito es menor que el de otras personas, ha llegado el momento de recuperar el deseo sexual:
Buscar la causa
Para poder tratar el problema es necesario indagar en la causa. Habla con tu pareja sobre lo que os está pasando, y de qué manera podéis ponerle la mejor solución.
Puede que se trata de la falta de tiempo, de un aumento del estrés, o incluso de algún problema hormonal o de impotencia. Cuando el apetito sexual se ve afectado hay diferentes tratamientos médicos o ayudas terapéuticas al alcance de todas las parejas que son una excelente opción.
Disfrutar a solas
Saber qué es lo que le gusta a cada uno en el terreno de la sexología comienza por la autoexploración del cuerpo. No temas a dedicarte un tiempo a la semana para que tanto tú como tu pareja practiquéis por separado.
Los juguetes sexuales como vibradores, succionadores o masturbadores para penes son ideales para descubrir a solas las preferencias sexuales. Junto con el sexo compartido, el individual es una parte muy importante de la sexualidad de hombres y mujeres de todas las edades.
Planear encuentros
No dejes que la falta de tiempo o el estrés te impida disfrutar de momentos íntimos con tu pareja. De la misma forma que dedicas un tiempo al trabajo, a las obligaciones del hogar, o a salir a tomar un café con un amigo, planea una cita erótica con tu pareja.
Piensa en un plan divertido para hacer juntos en casa. Prepárate para el encuentro, poniendo toda tu disponibilidad física y mental en ello. Se trata de centrarse en lo que realmente importa, dando el 100% de tu atención al disfrute junto con tu amado o amada.
Prolongar el tiempo de estimulación
Es cierto que el ritmo de vida actual y el aumento del nivel de estrés incide de manera negativa a la forma de disfrutar del sexo. Por falta de tiempo solemos tender a dedicar solo unos minutos a nuestra pareja, y esto puede no ser suficiente para ambos.
No tengas prisa para disfrutar del sexo. Comienza hablando o empleando diferentes estímulos sexuales para ir poco a poco. Las caricias, los masajes o los juegos os ayudarán a excitaros profundamente antes de llegar al momento crucial.
Nuevos estímulos
Otra forma de recuperar la libido es probar diferentes tipos de estimulación que no lleven directamente a la penetración. Sacad a relucir vuestras fantasías eróticas más ocultas, y practicarlas en pareja para el disfrute de ambos.
Si te falta inspiración, los libros y las películas son una excelente fuente de ideas. Recuerda que las relaciones siempre deben ser consensuadas, y que ambas partes se deberá sentir estimulada para que el disfrute sea el doble.
Utilizar juguetes sexuales
Por último cabe destacar una gran novedad que está revolucionando la sexualidad entre las parejas: el uso de juguetes. Ideales para innovar y probar cosas diferentes, en el mercado hay una gran variedad de juguetes para él, para ella, o para utilizar los dos al mismo tiempo, aumentando de manera automática el deseo sexual.
Los vibradores, dildos, arneses, succionadores o bolas chinas son solo algunos ejemplos de los más utilizados. Comparte con tu pareja cuáles son las prácticas que más te excitan, y buscad un juguete para compartir en común en vuestros encuentros.
No dejes que la falta de tiempo o los problemas de salud mental como el estrés o la ansiedad te impidan disfrutar de los múltiples beneficios que ofrece el sexo. El deseo sexual se puede recuperar fácilmente si buscas la mejor solución a medida junto con tu pareja.
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